El origen de las puertas 鳥居 "torii" se remonta a la antigua religión sintoísta, que se practicaba en Japón antes de la llegada del budismo. En el sintoísmo, las puertas se consideran la morada de los dioses y suelen verse como un vínculo entre el mundo humano y el divino. Las puertas torii también sirven como símbolo de respeto y reverencia hacia los dioses y las fuerzas espirituales que representan.
El diseño de las puertas torii suele ser muy sencillo y sin adornos, con dos postes verticales y dos travesaños que forman un arco tradicional. A pesar de esta sencillez, las puertas suelen estar pintadas con colores brillantes y adornadas con símbolos como la "shimenawa", una cuerda hecha de paja de arroz que suele utilizarse para marcar las zonas sagradas. Algunas puertas torii también están decoradas con shide, serpentinas de papel en zigzag que se cree que ahuyentan a los malos espíritus.
El uso de las puertas torii se ha extendido más allá de la religión sintoísta a otros aspectos de la cultura y la sociedad japonesas. Por ejemplo, se utilizan a menudo en parques públicos, jardines y otros espacios al aire libre para crear una sensación de paz y tranquilidad. Además, muchas empresas y hogares también utilizan las puertas torii como símbolo de buena suerte y prosperidad.
Uno de los ejemplos más famosos e icónicos de puertas torii se encuentra en el santuario Fushimi Inari de Kioto (Japón). El santuario está dedicado al dios de la agricultura y el comercio, y sus terrenos están salpicados de miles de puertas torii de color rojo brillante que forman un camino serpenteante a través del bosque. Las puertas son donadas por empresas y particulares como forma de buscar bendiciones y buena fortuna, y el santuario es un destino popular tanto para turistas como para lugareños.
Las puertas son un símbolo de la conexión entre los reinos humano y divino, y a menudo se asocian con la buena suerte, la prosperidad y la paz. Ya sea en un santuario o templo, en un parque o jardín, o en un negocio o casa, las puertas torii siguen desempeñando un papel importante en la cultura y la sociedad japonesas, recordando a la gente las fuerzas espirituales que dan forma a su mundo y la importancia del viaje de un reino a otro.